martes, 5 de marzo de 2013
HARD-BOILED
Siempre soñé con ser un detective
privado, al mejor estilo de Philip Marlowe, y recibir en mi despacho a hermosas
mujeres de largas piernas llenas de problemas matrimoniales. Parecerme a
Humphrey Bogart al caminar por la calle fumando un cigarro barato y encontrarte
en alguna triste esquina vestida de gala. O ser un tipo duro, a lo Sam Spade, y
animarme a pensar en voz alta frases como “tienes los labios demasiado rojos
para protagonizar una película en blanco y negro”. Pero la realidad es otra, ni
yo vivo en un policial negro ni vos sos una femme fatale.
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A veces la realidad no es como un día imaginamos, y acaba por tener un sabor más fuerte a rutina y tristeza... Tal vez no somos lo que esperábamos, pero ya sabes, sucede que a veces... :)
ResponderEliminarUn abrazo grande compañero!
Touché, Daniel. :)
ResponderEliminarEs una entrada muy, muy buena.
Un fuerte abrazo,
Marina.